Nuestra ruta sigue del Lago Titicaca hacia la ciudad de Arequipa. El trayecto en autobús es Copacabana – Puno – Arequipa y se hace un poco largo aunque ronde solo las 6h.
Arequipa se conoce en Perú como la ciudad blanca por su arquitectura colonial de piedra volcánica blanca y también por concentrar a bastante población europea. Ambas cosas muy ciertas.
La verdad es que el centro histórico de la ciudad superó completamente nuestras expectativas. Tras visitar múltiples ciudades coloniales a lo largo de Chile y Bolivia esperábamos ver solo una más… y no fue así.
Arequipa tiene un centro histórico que marca la diferencia. Sus calles cuadriculadas mantienen espectaculares iglesias, conventos y casonas de la época colonial, a la vez que ofrece servicios y establecimientos con mucho encanto para relajarse, comer y tomar algo.
Para conocer la historia y los principales puntos de la ciudad buscamos como siempre un Free Walking Tour. Por nuestra cuenta dimos paseos por las zonas del centro que nos recomendaron e hicimos la visita nocturna al más grande exponente cultural de la ciudad: el Convento de Santa Catalina.
RECOMENDACIONES Y COMENTARIOS:
– Comida local. Busca las picanterías. En especial recomendamos «La Mundial».
– Comida Peruana de nivel. Busca los restaurantes Tanta y Chicha.
– Free walking tour. Si puedes búscate un grupo en español ya que las explicaciones ganan en calidad y cantidad respecto el inglés.
– Alojamiento. Se puede encontrar a buen precio en el centro. Nosotros estuvimos en La casona del Sillar y lo recomendamos 100%.